Un híbrido entre donut y croissant.
Mitad donut, mitad croissant, con todo el sabor de uno y la ligereza
del otro. Se trata de un donut de masa laminada, relleno de crema y
con una capa de glasa y azúcar que lo recubre. ¿Te los vas a peder?
Los periódicos hablan de ellos, la
televisión habla de ellos, las redes sociales hablan de ellos y es
que por lo visto en New York, Dominique Ansel (que es el padre de
estas criaturas) se está haciendo de oro con las colas de gente que
aguardan en su pastelería para adquirir un “cronut” para el
desayuno. Solo se pueden comprar 2 cronut por persona y se fabrican
200 unidades al día a un precio de 5 dolares, y es que el trabajo
que tienen bien los merece.
INGREDIENTES
(unas 8 unidades)
Para la masa del cronut
150 gr de harina + 450 gr de harina (de
gran fuerza)
90 ml de agua tibia
30 gr de levadura
100 gr de mantequilla + 200 gr de
mantequilla
2 huevos grandes
90 gr de azúcar
90 ml de leche
Para la crema
750 ml de leche
150 gr de azúcar
40 gr de maicena
30 gr de harina
4 yemas
1 palo de canela
Piel de un limón
Para la glasa
250 gr de azúcar glass
1 cucharada de zumo de limón
6 cucharadas de agua
ELABORACIÓN
Para la crema
1. Reservar un vaso de leche y calentar el
resto con la canela y la piel de limón hasta que llegue a hervir.
Después retirar los aromas.
2. En un bol mezclar sin formar grumos: el
azúcar, la maicena, la harina, la reserva de leche y las yemas.
Mézclalo con la leche caliente y llévalo nuevamente al fuego sin
dejar de remover con la varilla hasta que espese y haga el primer
hervido.
3. Retira del fuego y déjalo enfriar
tapada a piel con papel de horno para que no haga costra.
Para la masa de cronut
1. Tamizar las harinas en dos boles
diferentes y hacer dos volcanes. El volcán con los 150 gr de harina
mezclarlo con la levadura diluida en el agua y amasar, dejar reposar
tapada durante mínimo 1 hora. Con esto obtendremos una masa que nos
servirá de esponja.
2. Mezclar y amasar los 450 gr de harina
con el resto de los ingredientes en este orden: azúcar, leche,
huevos y 100 gr de mantequilla en pomada (reservar los 200 gr de mantequilla fría para después). Incorporar a esta masa la masa esponja que ya
previamente habíamos fermentado y amasar durante 15 minutos. Ahora
tenemos una masa húmeda y algo pegajosa. Lo que hay que intentar ahora
es que nuestra masa coja aire y elasticidad, no te preocupes en absoluto si
se te queda pegada a las manos pues se te irá separando a medida que
la trabajes.
3. Una
vez lista realiza dos cortes en cruz sobre su superficie y deja
reposar tapada 20 minutos. Pasado ese tiempo desgasifica amasando un
pelín y estira la masa con ayuda del rodillo sobre una superficie
espolvoreada de harina. Ha de quedar con forma rectangular y 1 dedo
de grosor. Coloca en el centro de la masa los 200 gr de mantequilla fría y
pliega los bordes superior e inferior del rectángulo sobre si a
forma de sobre dejando la mantequilla encerrada dentro.
4. Ahora
hay que proceder como una masa hojaldrada. Estira de nuevo con ayuda
del rodillo hasta formar un rectángulo y vuelve a doblar pliegue
superior e inferior, voltea la masa y estira nuevamente. Repite la
misma operación una vez más y deja reposar en la nevera 30 minutos. Tras
el reposo vuelve a estirar y realiza la operación anterior 2 veces
más.
5. Finalmente
estira la masa y déjala de 1 dedo de grosor. Con ayuda de dos
cortadores uno grande y otro pequeño ve cortando los cronuts sobre
toda su superficie. Colócalos en una bandeja forrada de papel de
horno y déjalos fermentar 20 minutos.
6. Tras
el fermentado pon un perol hondo y con bastante aceite de girasol a
calentar. Fríe la masa por ambos lados con mucho cuidado y de uno en
uno.
7. Recorta
el papel de horno alrededor de todos los cronuts e introdúcelos con
el papel dentro del aceite sin manipularlos. Automáticamente el
papel se despegará y podrás retirarlo. Para freír el cronut
ayúdate de un cucharón de madera y una espumadera, así podrás
voltearlos como si fuesen churros. Procura que el aceite no esté ni
muy caliente ni muy frío, lo ideal son 170ºC (juega con el fuego
subiendo y bajando).
8. Una
vez fritos déjalos enfriar sobre papel absorvente, rellénalos con
la crema pastelera (con ayuda de una manga y boquilla fina) y glasea por encima.