Nunca
has pensando en que la Preysler te invite a su casa y te ponga una
bandeja llena de Ferrero-Rocher...? ¡Pues yo sí!
Y
como mi presupuesto no da para ponerle a la gente que viene a casa
una bandeja llena de Ferreros y que salga “Ambrosio” (el
mayordomo) con pajarita de la cocina y los ofrezca, pues a veces me las tengo que ingeniar para de forma graciosa, barata y original
sorprender a mis invitados y vecinas. En este caso saliendo yo de la cocina con la
huevera de cartón y unos huevos un tanto especiales..., así al
menos si cuchichean de mí que sea de manera constructiva.
No,
por desgracia no tengo a la gallina de los huevos de oro... pero lo
que si tengo es imaginación de sobra para hacer ¡bizcochos con
forma de huevo!
¡¡Échale
un par de huevos!!! y créeme que si tienes huevos puedes hacerlo.
PRIMERAMENTE
Lo
primero es comenzar preparando las cáscaras de huevo
“moldes”.
Pinchamos la parte del huevo donde se encuentra la cámara de
aire, es
decir, la parte inferior del huevo más ancha y retiramos las
cascarillas, haremos
un hueco, de al menos el grosor de un dedo
meñique, por donde
vaciaremos el huevo
e introduciremos la masa
después. Es fácil, si lo haces bien claro.
Ahora
vaciamos el huevo, si lo has roto por donde te he dicho te
saldrá
primero la clara
fácilmente y después con la ayuda del cabo
de una cucharilla saca
la yema que al ser
más consistente se resiste
la muy jodida. Aunque no hay mal que por
bien no venga
porque
así tendrás por un lado las claras y por otro yemas.
Procederemos
así con todas las cáscaras y luego las aclaramos bajo
el grifo con
agua templada.
Después
llenamos un cuenco con agua templada y salada (100 gr
por litro aproximadamente).
Meteremos las cáscaras de huevo en
el agua, donde las dejaremos,
con cuidado de que queden
totalmente cubiertas por el agua, por
espacio
de media
hora. No hace falta que diga que para que no floten hay
que llenarlas primero
por dentro.
Pasado
ese tiempo, las sacamos y las dejamos secar con el agujero hacia
abajo sobre papel de cocina. ¿Te has fijado que después de este
proceso ya no tienen la marca esa con la numeración que le ponen a
cada huevo?
Fundimos
un poco de mantequilla en el micro y echamos un chorrito dentro de
cada cascarón, rotamos bien para que se impregnen todas las paredes
interiores y vaciamos el exceso. ¡¡Ya las tenemos listas para que
nos sirvan de molde!!
A
partir de aquí puedes rellenarlas con la masa de bizcocho que te de
la real gana, hablando claro.
Yo
he procedido de la siguiente manera:
INGREDIENTES
100
gr. cobertura de chocolate picada
100
gr. cobertura de chocolate blanco picada
25
gr. cacao en polvo
50
gr. mantequilla
140
gr. aceite girasol
2
huevos
4
yemas
325
gr. azúcar
200
gr. harina
250
gr. agua
3
cucharaditas rasas: 1 de sal, 1 de nescafé y 1 de vainilla en polvo
ELABORACIÓN
Precalentar
el horno a 200ºC. Poner el agua a hervir y la mantequilla a fundir
(cuidando de que no coja color)
Mezclar
en un cuenco el cacao, los chocolates y el nescafé, diluir con el
agua hirviendo, removiendo bien hasta que quede una mezcla homogénea.
Incorporar
a la mezcla anterior la mantequilla fundida y el aceite. Mezclar todo
el conjunto muy bien. Añadir la vainilla.
Romper
los huevos, mezclar con las yemas y batir ligeramente para romper su
consistencia, no es necesario batirlos demasiado, sólo como si
fueras hacer una tortilla. Incorporarlos a la mezcla anterior y
volver a mezclar. Añadir el azúcar poco a poco y mezclando bien.
Tamizar
la harina, mezclarla con la sal y añadirla a la masa anterior,
mezclar bien cuidando de que no queden grumillos.
Pasamos
la mezcla a una manga pastelera con boquilla del tamaño
adecuado a
los agujeros
de nuestros huevos (depende del tamaño
que tengas los huevos....
jajaja)
¿Qué
no tienes manga?, ¿qué me estás contando? bueno pues
puede hacerse
con una bolsa de
congelación, cortándole la puntita,
pero es más sencillo con
boquilla y se mancha
menos, ¿qué no
tienes bolsas de congelación? pues chiquilla coge
un embudo.
Rellenamos
cada cáscara de huevo hasta 3/4 partes. Si usas
cualquier receta
de bizcocho que lleve levadura, es recomendable
llenarlo solo hasta
1/2 de su capacidad.
Colocamos
los huevos sobre la misma huevera de cartón en la que
venían pero tomando
la precaución de forrarla con papel de
aluminio no vaya a ser que se derrame
la masa y se nos queden
pegados al cartón, de esta forma los huevos
se sostendrán
erguidos.
Horneamos
unos 20 o 25 minutos. Ten en cuenta que al pincharlo
con un palillo
debe salir
seco.
Sacamos
del horno, les retiramos el exceso de masa (en el caso de
que se haya
salido) y
limpiamos los restos de la cáscara con un
paño húmedo. ¡¡Ojo!!
que si lo dejamos enfriar
luego ya es mucho
más complicado retirar los restos.
Dejarlos
enfriar y servirlos con el agujero hacia abajo, como si fuese un
huevo pasado por agua. ¡¡¡YA VERÁS TÚ QUE CARA PONE LA GENTE!!!
José López